LA HISTORIA
Un 8 de marzo de
1857, un grupo de obreras textiles tomó
la decisión de salir a las calles de Nueva York a protestar por las míseras
condiciones en las que trabajaban.
Distintos movimientos se sucedieron a partir de esa
fecha. El 5 de marzo de 1908, Nueva York fue escenario de nuevo de una
huelga polémica para aquellos tiempos. Un grupo de mujeres reclamaba la igualdad salarial, la
disminución de la jornada laboral a 10 horas y un tiempo para poder dar de
mamar a sus hijos. Durante esa huelga, perecieron más de un centenar de mujeres
quemadas en una fábrica de Sirtwoot Cotton, en un incendio que se atribuyó al
dueño de la fábrica como respuesta a la huelga.
En 1910, durante la Segunda Conferencia
Internacional de Mujeres Trabajadoras celebrada en Copenhague (Dinamarca) más
de 100 mujeres aprobaron declarar el 8 de marzo como Día
Internacional de la
Mujer Trabajadora.